Serie rara, rara... pero rara rara... Y aun así las locuras de estos divertidos personajes tienen su encanto y su propia (y rara) personalidad. Ideal si quieres ver algo que haga que tu cabeza explote.
Un excéntrico detective y su (casi forzado) ayudante se ven envueltos en un desconcertante caso lleno de humor y misterio.
'Desconcertante' es la palabra que acudirá a tu cabeza si decides comenzar esta serie. Los primeros capítulos son rápidos, caóticos, con tu cabeza intentando explicar qué está sucediendo en pantalla mientras las locuras se suceden una tras otra.
Samuel Barnett y Elijah Wood son los protagonistas de esta historia, que camina entre el humor, el misterio, el thriller y la ciencia ficción. Tiene a su favor que los personajes me cayeron bien desde un principio, lo cual es bastante importante en este tipo de historias. Con Todd (Elijah Wood) y la serie de catastróficos acontecimientos que le van sucediendo es difícil no empatizar; y con Dirk, bueno, hay que conocerle...
A ellos se suman otra gran cantidad de personajes (a cada cual más raro y extravagante) que van cruzándose de principio a fin de la trama dando lugar a escenas desconcertantes, raras y divertidas. Todo esto sumado a un caso que resolver con altas dosis de misterio y ciencia ficción y un tercer acto en el que hay que estar bien atento para intentar que tu cabeza no termine por explotar.
En conclusión, serie rara pero entretenida y bastante divertida. Para quienes busquen algo distinto (y puede que desconcertante). Todo está conectado. Y nada está conectado. (Disponible en Netflix)
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